¿Será el 2015 el año clave de la montaña gallega?

La montaña gallega, esa gran olvidada estos últimos años y que tanto le ha dado al automovilismo gallego. Escuela de grandes pilotos en los que para ganar es necesario una conducción fina, dónde cada detalle por mínimo que sea cuenta, donde el crono es tu gran rival, donde los tiempos son tan apretados... La montaña gallega, esa que en los últimos se ha esfumado como un azucarillo en el café contrariándose con otras modalidades de poco tiempo de vida.

Subida míticas como Cerdedo (con su famoso salto), Pereiro de Aguiar, Silleda, Xunqueira de Ambía, Touro, Castro de Beiro, Lugo, Cabanelas, Cortegada, Amoeiro, Rodeiro, Vila de Cruces... cuánto hemos perdido... No sólo subidas, sino pilotos, quién no recuerda a Nonito Varela, Benito Varela, Cristóbal Serantes, Manuel Esperón, 'Kude'...

Benito Varela volando en el salto de Cercedo

Si comparamos las subidas de hace aproximadamente 6 años el panorama actual es para echarse a llorar. Con la FGA cada vez menos involucrada en la inyección que este espectacular campeonato necesita y más centrada en poner trabas a los que quieren innovar, la vida de este campeonato esta, espero equivocarme, muy cerca de terminarse.

Es triste que un campeonato de referencia durante muchos años y escuela de muchos jóvenes se vea relegado a esta situación tan desesperante para pilotos y aficionados. Con unas inscripciones que en 2014 eran muy escasas (a excepción de Chantada y Pontevedra). A penas superando la treintena de inscritos, de los cuales un tercio son pilotos locales que salen a una prueba de forma excepcional, la situación es alarmante. Creo que el 2015 debe ser un año de análisis y de ver que se está haciendo bien y que se está haciendo mal y a partir de ese momento actuar. O eso esperemos.