Durante el rally, tuvieron un problema con la caja de cambios secuencial y realizaron diferentes ajustes en el set up de suspensiones, pero aun así el catalán no estaba del todo satisfecho con el comportamiento del coche. A falta de dos tramos para dar por finalizado el Rally de Trasmiera, la bomba de gasolina dejo de funcionar y al no disponer de recambio, a Orriols no le quedó más remedio que abandonar.
“Salvo por el abandono, todo ha sido positivo y estoy encantado de haber corrido este rally. Compramos el coche esta misma semana, lo pintamos y nos presentamos en el shakedown sin haber probado el coche, nuestro objetivo en este rally era a modo de test y disfrutar de este gran evento. La caja de cambios no quedó bien ajustada y nos dio problemas todo el fin de semana y luego lo de la bomba de gasolina ya nos obligó a abandonar, de todas formas, quiero agradecer a Fran Caldevilla Motor y todo su equipo por el gran esfuerzo que han hecho para que pudiéramos estar presentes en este Rally con el Subaru, y felicitar a la organización de este rally por el buen trato recibido”, explica Orriols.
El catalán volverá a subirse al Porsche en el Rally de Nueno de Huesca el próximo 12 de junio, aunque empieza a plantearse encontrarle sustituto: “Nos han salido diferentes compradores y puede que busquemos otro coche más competitivo”. No obstante, todavía “no hay nada claro” y Orriols tendrá que reajustar el calendario en función de las nuevas condiciones. El plan para el Subaru sí que está definido: “vamos a rearmarlo entero, a revisarlo en profundidad, cambiarle la decoración y hacer algún rally más para seguir ajustándolo”.
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